¿Es vital Florida para las elecciones de noviembre en Estados Unidos?
Los habitantes de este estado son indecisos, donde podrían ganar tanto demócratas como republicanos, pero las encuestas están mostrando que el giro hacia el primer partido es irreversible
Frank López Ballesteros
Ojo Global Noticias
Nadie duda que los latinos tienen un peso clave en la política de Estados Unidos con 27 millones de potenciales votantes, sobre todo, en momentos en que esta comunidad, o los inmigrantes en general, son el caballo de batalla del candidato republicano Donald Trump.
¿Pero es Florida un estado clave el 8 de noviembre? “Puede ser”, si realmente la apatía histórica que ha caracterizado a la comunidad latina en las elecciones presidenciales de los últimos 30 años se queda a un lado y el “yo decido” se transforma en un efecto masa.
De ese universo de 27 millones de votantes que tiene el país, históricamente un 20% menos deja de sufragar el día de las elecciones, y corresponde a los latinos. Hasta febrero de 2016, 1.795.000 hispanos estaban registrados para acudir a las urnas en Florida, 14,9% del universo de votantes activos que tiene el estado (de unos 12 millones).
Los datos que maneja el Centro Pew sobre preferencia de voto explica el creciente interés del partido demócrata para que el registro de votantes quede abierto, al menos, en lo que queda de semana, luego de que un juez federal les diera la razón y extendiera el plazo hasta el miércoles 12 de octubre.
Esto constituye una victoria parcial para la candidata presidencial demócrata Hillary Clinton, quien sabe que en Florida se puede decidir su victoria sobre Trump.
Un grueso de los votantes latinos registrados se inclina por su partido, unos 687 mil (14,8%) mientras que 479 mil lo hacen por el partido republicano (11,2%), según los datos de la División Electoral del Estado de Florida.
Con 19,6 millones de habitantes, 4,8 millones latinos según el Census Buro, Florida es el equilibrio electoral de Estados Unidos en lo que se refiere a esta comunidad: es la tercera más grande del país, con 8,7% del total nacional. El primer lugar lo ocupa California con 6,9 millones de votantes con alguna nacionalidad de la América hispana, indica la Oficina del Censo.
Las dudas
Florida, sin embargo, es un estado indeciso, donde podrían ganar tanto los demócratas como los republicanos, lo que la convierte en un lugar estratégico. En 2008, cuando Barack Obama triunfó en las elecciones por primera vez, el candidato demócrata se llevó el 51% de los votos, mientras que su contrincante republicano, John McCain el 48,2%, reflejan los datos de la División Electoral.
Pero fue distinto en 2004 cuando George W. Bush se llevó el 52,1% para los republicanos consagrando su reelección presidencial y John Kerry perdió por un margen de 5% menos.
Y ni hablar de 2000, cuando por una diferencia mínima en Florida que dio un empate de 48% a 48%, Bush, que aspiraba por primera vez a la Casa Blanca, terminó favorecido por una decisión de la Suprema Corte, debido a que en este estado el margen era demasiado estrecho.
Florida ha sido la puerta de entrada para una gran mayoría de suramericanos y caribeños lo que sostiene el hecho de que la comunidad hispana haya crecido del 10,7% de los votantes registrados en 2006 a 14,9% en la actualidad, sobre la base de cifras de la División Electoral. Esto supera en números, incluso, a los votantes negros registrados que son el 13,3%.
Clinton adelante de todos
La Encuesta Nacional del Centro de Investigación Pew, difundida este martes, mostró que seis de cada diez votantes latinos registrados (58%) respalda a Clinton, mientras que sólo el 19% apoya a Trump; 10% está a favor del candidato Libertario Gary Johnson y 6% con Jill Stein, del Partido Verde.
Clinton ha desplegado su artillería de campaña en los votantes jóvenes, donde está el grueso de quienes le dan apoyo, y como demostró el estudio del Pew, los “millennials hispanos” con edades de 18 a 35 años son favoritos con la demócrata, un punto clave tomando en cuenta que representan casi la mitad de los 27,3 millones de latinos que podrán votar.
En cuanto a los latinos que respaldan a Trump, alrededor de ocho de cada diez (83%) nacieron en EEUU, en comparación con 64% de los que nacieron en el país entre los votantes latinos que abanderan a Clinton.
En las cuestiones que determinarán el voto este año, los latinos registrados dicen que la educación, la economía y la salud son los más importantes. Un 83% afirma que el tema de la educación será «muy importante» para su voto, 80% dice lo mismo sobre la economía y 78% dice lo mismo sobre el cuidado de la salud.
De acuerdo al diario The New York Times, cada año 800.000 latinos cumplen 18 años y los republicanos y demócratas gastan millones de dólares en tratar de engatusar a los electores hispanos, el asunto es que si la apatía vuelve a reinar como en otros procesos, el resultado sobre los candidatos puede impactar.
La organización estadounidense de funcionarios latinos estima que sólo unos 13,1 de 27,5 millones de votantes hispanos acudirían a las urnas el 8 de noviembre, por lo que una movilización de ese nuevo electorado joven será importante, y en vista de la importancia que tomaron los inmigrantes en esta contienda, puede haber sorpresas.
“Hemos visto la importancia vital de la Florida para los resultados de las elecciones nacionales, y ésta no será una excepción”, explicaba a la Associated Press Renata Soto, presidenta de la Junta de Directores del National Council of La Raza (NCLR).