La cuestionada santidad de Teresa de Calcuta
Por Ojo Global Noticias
Redacción
El papa Francisco declaró el domingo la santidad de la Madre Teresa, con lo que rindió homenaje a una religiosa que cuido de los más desamparados, pero su figura sigue envuelta en polémica por quienes no la consideran tan amiga de los pobres.
El escritor inglés Christopher Hitchens la describió como una «fundamentalista religiosa, activista política, sermoneadora a la antigua y cómplice de los poderes seculares de este mundo», citaba BBC Mundo en su portal.
Entre las críticas que recibe el modelo de caridad de la monja sobresale la de que no era tanto una amiga de los pobres, como una amiga de la pobreza. Quien mejor ha documentado ese aspecto fue el propio Hitchens en “La postura del misionero. Madre Teresa en la teoría y la práctica”, autor también del documental ‘Ángel del Infierno’. Acompañó a la santa por las calles de Calcuta y escuchó de su boca cómo elogiaba la pobreza, la enfermedad y el sufrimiento como “regalos del cielo”, y decía a la gente que aceptase esos regalos alegremente, citaba el diario El País de España.
Mucho después, en 2003, el médico residente en Londres Aroup Chatterjee publicó una durísima crítica a la monja tras haber realizado cerca de 100 entrevistas con personas relacionadas con su congregación.
Atacó lo que calificó de una falta de higiene horrible -reutilización de agujas hipodérmicas, por ejemplo- y el caótico mantenimiento de las instalaciones de sus centros, entre otras cosas, reflejaba la web británica.
Cómo se produjo la pasmosa sublimación en vida de la nueva santa no es un misterio. Teresa de Calcuta fue muy crítica con Juan XXIII y con las reformas del Concilio Vaticano II, y groseramente agresiva con los obispos, teólogos, sacerdotes y monjas de la liberación, así que el papa Juan Pablo II la tomó muy pronto como bandera de su restauración eclesial.
El papa polaco maquinó incluso un mecanismo para facilitar, a la muerte de su admirada compañera de viaje, la pronta proclamación de la monja como beata y santa, en un proceso inusitadamente rápido. Sin duda, pensaba también en hacer lo mismo con otro de sus iconos, el fundador del Opus Dei, san Josemaría Escrivá, también ‘santo súbito’, escribió Juan Bedoya en El País.
Para Francisco, la Madre Teresa puso en práctica su idea de que la Iglesia debe ser un «hospital de campaña» misericordioso para los más pobres entre los pobres, aquellos que sufren pobreza material y espiritual. Dijo que le resultaba difícil llamar «santa Teresa» a una mujer de ternura tan maternal.
La polémica está servida y ríos de tinta correrán sobre la vida de Agnes Gonxhe Bojaxhiu, el verdadero nombre de la hoy “Santa Teresa de Calcuta”.