Análisis: El Real Madrid 2017-2018 no termina de carburar
El Real Madrid de Zinedine Zidane cayó de forma sonrojante (1-2) contra el recién ascendido Girona FC. Los blancos no perdían contra un equipo recién ascendido desde hace 27 años, cuando cayeron ante el Real Burgos en 1990 con idéntico marcador
Ojo Global Noticias.
Por: Luis Gerado López H.
Contra todo pronóstico y en partido correspondiente a la décima jornada liguera, el Real Madrid, campeón de la Liga Española el curso pasado (16-17), caía estrepitosamente como visitante ante el modesto Girona FC, equipo recién ascendido de categoría y que marcha actualmente en la 12ava posición de la tabla de clasificación. El equipo entrenado por Pablo Machín le dio un repaso táctico y futbolístico al equipo blanco, que se vio superado de principio a fin y que suma así su segunda derrota en liga de la temporada.
Al margen del brillante partido jugado por los hombres del Girona, la derrota sirvió para confirmar la crisis de juego en la que está inmerso el Madrid, que a pesar de haber comenzado su temporada de manera brillante cuando consiguió las Supercopas de España y Europa (ante Barcelona y Manchester United) se ha ido desinflando en la Liga, en la que marcha en tercera posición (empatado con el Atlético de Madrid) detrás del Barcelona y Valencia.
Varios son los factores que inciden en la mala racha del equipo merengue, el bajón de rendimiento de varios jugadores claves, las lesiones y la falta de profundidad en el banquillo son algunos de los más visibles.
BAJÓN DE RENDIMIENTO…
Empezando por su buque insignia, Cristiano Ronaldo, que a pesar de que estuvo suspendido 4 partidos por empujar a un arbitro, ha estado negado de cara al gol y mostrando evidentes gestos de ansiedad. En 6 partidos jugados de Liga, sólo acumula 1 gol y 1 asistencia, números que contrastan notablemente con las estadísticas a las que tiene habituados a la afición a estas alturas de la temporada.
Si el portugués anda de capa caída de cara a la portería, a sus compañeros de delantera Karim Benzema y Gareth Bale, no les va mucho mejor. A Benzema se le critica constantemente por su indefinición entre un delantero y un mediapunta y más aún, por el notable favoritismo que muestran el técnico y presidente por su titularidad con respecto a sus competidores en el puesto. Parece estar más preocupado por asistir a Ronaldo que por anotar goles y disparar a puerta, condiciones imprescindibles para ser el 9 titular del Madrid. Sus números son idénticos a los de Ronaldo: 6 partidos jugados en Liga, 1 gol y 1 asistencia.
El caso de Bale, da para un capítulo de la dimensión desconocida. Su calvario con las lesiones le han permitido participar en sólo 5 partidos de Liga esta temporada, y aunque sus números con respecto a sus compañeros de delantera parecen mejores (2 goles y 1 asistencia), su influencia en el juego del equipo es nula, con constantes desconexiones que lo hacen víctima de las iras de su propia afición.
Por su parte, el mediocampo del Madrid, sostén de sus éxitos mas recientes, pareciera que no termina de romper esta temporada. Con la excepción de Isco, que mantiene un nivel superlativo (3 goles y 3 asistencias en 10 partidos jugados de Liga) y que se ha consolidado como el verdadero motor de los blancos esta temporada, el resto de sus compañeros de demarcación parecen haber dado un paso atrás con respecto a cursos anteriores.
Casemiro no está robando balones como suele hacerlo y en su labor de contención y destrucción parece verse constantemente superado, en buena parte por la nula ayuda defensiva de sus compañeros. Tony Kroos no ha perdido su regular aportación en la construcción del juego, pero sus nulos conceptos defensivos a veces penalizan al equipo. El caso más preocupante es el de Luka Modric, cuya aportación tanto ofensiva como defensivamente es vital para los merengues y que parece estar pasando por un bache en su juego.
La línea defensiva del Madrid es una de las lagunas más significativas del equipo. Prácticamente ninguno de sus componentes han demostrado su nivel habitual, a excepción de Danny Carvajal su lateral derecho y actualmente lesionado. En 10 partidos de Liga presentan 9 goles en contra, lo que indica una media de casi un gol recibido por partido. Raphael Varane y Sergio Ramos no han mostrado la contundencia necesaria, alternando actuaciones convincentes y errores de bulto que le han costado puntos importantes al equipo. Hasta el apagafuegos del equipo, Nacho Fernandez, parece haber bajado un peldaño su nivel. Del cuarto central de la plantilla, Jesús Vallejo, todavía no hay noticias debido a su constante propensión a las lesiones.
Capítulo aparte merece Marcelo, considerado por muchos el mejor lateral izquierdo del mundo. Acostumbrado a ser una apisonadora por la banda izquierda generando ocasiones de gol gracias a sus notables recursos ofensivos, ha vuelto de su lesión con evidente sobrepeso. Por todos es conocidas sus lagunas a la hora de defender, hecho que compromete a sus compañeros de defensa que constantemente deben cubrir su zona ante sus ausencias, generando un desajuste que se traduce en goles en contra. Su titularidad ha estado asegurada por sus recursos ofensivos, pero a día de hoy, el brasileño no aporta ni trabajo defensivo ni asistencias, lo que debe hacer pensar a Zidane en dar una alternativa a su competidor por el puesto, el hispano francés Theo Hernandez.
LAS LESIONES
A pesar de tener uno de los mejores preparadores físicos del fútbol (Antonio Pintus) y un equipo de médicos y fisioterapeutas a la altura del mejor equipo del mundo, el Real Madrid promedia casi un lesionado por partido esta temporada. Zidane por un motivo u otro y en diferentes momentos de la temporada en curso no ha podido contar con Vallejo, Varane, Benzema, Asensio, Kovacic, Theo, Kroos, Marcelo, Carvajal, Keylor y el eterno lesionado: Gareth Bale. Esto ha provocado que el técnico francés no pueda alinear su once de lujo constantemente, improvisando en muchas ocasiones con jugadores fuera de posición por necesidad y sin poder contar con jugadores de recambio de nivel para dar vuelta a los partidos que tácticamente se han complicado.
LA FALTA DE BANQUILLO
La plantilla del año pasado estaba totalmente doblada con jugadores de nivel por cada puesto, a excepción del lateral izquierdo donde Fabio Coentrao estuvo (como casi toda su carrera) lesionado toda la temporada y el puesto de pivote defensivo, donde Casemiro, no contaba con un recambio natural. Si bien es cierto que este año esos puestos han sido doblados con Theo y Marcos Llorente como recambios de Marcelo y Casemiro, el resto de los suplentes o la segunda unidad ha perdido mucho fuelle con respecto a los del curso pasado.
El hueco dejado por Pepe en la defensa ha sido profundo a juzgar por los resultados. Su recambio, Vallejo, es un jugador propenso a las lesiones, con buena pinta, pero con todo por demostrar. En el mediocampo Dani Ceballos ha demostrado buenas maneras junto a Llorente pero son jugadores de corte distinto al hueco dejado por James Rodriguez, de quien se echan en falta sus goles (11) y asistencias (13). En la delantera quizá, es donde más huérfano ha quedado el equipo con la salida de Alvaro Morata (20 goles y 6 asistencias) y Mariano Diaz (5 goles), ya que ante la sequía ofensiva de sus principales delanteros, el equipo sólo cuenta con el joven Borja Mayoral, que no parece todavía preparado para asumir tan importante función.
Sea como sea, Zidane está obligado a dar con la tecla pronto para regresar al Madrid a la senda de la regularidad y el juego fluido, porque a pesar de que en la Liga de Campeones el equipo marcha líder de su grupo (empatado con el Tottenham), en la competición liguera parece haber perdido el tren con respecto al Barcelona (8 puntos de ventaja). El Real Madrid necesita dar un golpe sobre la mesa, de lo contrario, podría verse condenado a una temporada sin títulos.
Luis Gerardo López H. es Periodista especializado en deportes, Locutor y Presentador para Radio y TV.
Twitter: @luisglopez82